Ladrón con mala suerte en Rawson lo pillaron in fraganti , le pegaron y robaron.

Un ladrón después de ingresar a robar a la casa que habita una policía del Comando Radioeléctrico y su pareja en Rawson.

Según precisaron fuentes policiales a este diario, el sospechoso, de 29 años, tomó una todoterreno y otros elementos que puso en una mochila y salió de la vivienda.

 
Sin embargo, no llegó demasiado lejos: la uniformada y su pareja lo sorprendieron cuando arribaban al domicilio. Allí, el sujeto se deshizo de la bicicleta y corrió.

    
Pero fue interceptado a los pocos metros por la pareja de la mujer. Ahí lo retuvieron y aparecieron algunos vecinos para ver qué pasaba, indicaron en la fuerza.

Antes que llegaran los colegas de la damnificada, los vecinos molieron a golpes al delincuente y por si fuera poco, le terminaron robando la gorra que tenía puesta y las zapatillas, agregaron en la Policía.

    
El ladrón en desgracia fue identificado en la fuerza como Nicolás Daniel Olmos, de 29 años y domiciliado en la Villa Fleury, Rawson.

Alrededor de las 23 de ayer, este sujeto fue hasta la vivienda de la uniformada, quien vive en la calle José Dolores. 

En la Policía revelaron que Olmos no violentó ningún acceso de la vivienda de la cabo Morena Cabrera, sino que accedió por el fondo, tras saltar la pared de una casa colindante.

Una vez dentro sustrajo de varias cosas, como una bicicleta Venzo rodado 29, una mochila en la que guardó 3 botellas con bebidas alcohólicas, una máquina de afeitar, 3 relojes pulsera y una malla, dijeron en la Policía.

    Lastimado, descalzo y sin gorra, así quedó el sospechoso tras ser atacado por los vecinos del lugar.
Cuando salía del domicilio, Olmos fue sorprendido por la policía y su pareja. Lo persiguieron y lo atraparon a los pocos metros.

Segundos después aparecieron varios vecinos de la cabo y le dieron una paliza al joven delincuente: le pegaron trompadas y patadas.

También le robaron la gorra y las zapatillas antes de que llegaran efectivos del Comando Radioeléctrico Sur a ponerlo a salvo.

El sujeto terminó ensangrentado y sin gorra, ni zapatillas. Además, preso y con una causa en Flagrancia por el delito robo agravado por escalamiento y efracción.