Un forense ratificó que Nora Dalmasso tuvo sexo consentido cuando ocurrió el crimen

Mario Vignolo, quien ya había declarado como testigo, dijo que la víctima tuvo “sexo consentido, probablemente con una persona conocida” antes de morir. Volvió a descartar la hipótesis de un homicidio cometido por un sicario.

Policiales 03 de junio de 2022 télam télam
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Un médico forense declaró este jueves por segunda vez en el juicio por el crimen de Nora Dalmasso, la mujer asesinada en noviembre de 2006 en la ciudad cordobesa de Río Cuarto, y dijo que la víctima tuvo “sexo consentido, probablemente con una persona conocida” antes de morir, con lo que volvió a descartar la hipótesis de un homicidio cometido por un sicario.

Se trata de Mario Vignolo, quien ya había declarado como testigo el 10 de mayo, y que fue nuevamente citado ante el jurado popular y el tribunal técnico por pedido del fiscal Julio Rivero a los efectos de abundar algunos detalles que ya había manifestado en su exposición anterior.

Luego del breve testimonio en el juicio, Vignolo dialogó con la prensa local y dijo que fue convocado para ampliar sobre los resultados científicos que había obtenido durante los estudios forenses.

En ese sentido, el médico forense dijo que le preguntaron si tenía experiencias sobre muertes por encargo y que respondió que estuvo en muchos trabajos realizados en El Salvador, Honduras y México, donde los casos suelen ser “más crueles”, al tiempo que en los hechos de “acá” en los que intervino fueron “por disparo de arma de fuego”.

Al ser consultado sobre el perfil del presunto asesino, Vignolo dijo que “es probable que haya sido un conocido” de la víctima porque “para tener una relación consentida tiene que ser un conocido”.

Asimismo, el testigo descartó que se haya tratado de un crimen por encargo cometido por un sicario al manifestar que “no había lesiones paragenitales ni extragenitales que por lo general suceden con la violación, con sexo violento”; y que las lesiones que tenía Nora era propio de un acto sexual “brusco”.

La persona que cometió el crimen era “temperamental, con fuerza física, agresiva, personalidad fuerte y poseedora”, precisó y agregó y que un sicario no usa una bata para asesinar ni mucho menos la deja en la escena del hecho.

“En ese caso fue improvisado”, por lo tanto “no premeditado”, afirmó Vignolo, quien trabajó en el análisis del protocolo de autopsia realizado sobre el cuerpo de la víctima.

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